Guía práctica para la comprensión del bosquejado y sus características.

Fundamentos De Los Bosquejos

Los bosquejos son diferentes al dibujo de un objeto o algo que ya existe; es un proceso en el que el o los creadores intentan dar una definición externa a una sugerencia imaginada en su propia representación más general. Gran parte de la teoría del diseño y el trabajo de investigación sobre el bosquejo se han basado en los dominios del diseño arquitectónico y el diseño de productos en ingeniería, aunque se hacen bosquejos para prácticamente cualquier idea que esté naciendo, por ejemplo: prototipos tecnológicos, programas de sistemas, ideas de negocio, proyectos, diseños, procesos, incluso, un discurso o conferencia sobre algún tema.

Funciones de los bosquejos

La principal función de un bosquejo es estructurar un marco de referencia para la distribución de sus elementos, por ejemplo: temas y subtemas en un evento, títulos y subtítulos en una investigación, unidades y capítulos en un escrito, partes y funciones en un prototipo, etapa y situaciones en la experiencia del cliente, o componentes prácticos y esenciales en un diseño, pero también:

• Jerarquiza las ideas creando una representación con significado,
• Ayuda a expresar ideas complejas,
• Mejora la comprensión de la interpretación para el diálogo, la exploración y la comunicación abierta y fluida,
• Establece un debate para la transformación y la creación colaborativa,
• Delimita el alcance y
• Detecta faltantes o vacíos en la lógica.

Importancia de los bosquejos

Los bosquejos son el primer paso para un proceso creativo que busca la innovación porque sirven como memoria externa que registra y archiva todas las ideas para su posterior inspección, como proveedores de pistas visuales para la asociación de problemas funcionales y como escenario físico en el que los pensamientos funcionales se construyen sobre la marcha de una manera situada. Por estas razones, los creadores los utilizan durante la generación de conceptos, al externalizar y visualizar problemas, en la revisión y el perfeccionamiento de ideas, facilitar la resolución de problemas, el esfuerzo creativo, la percepción y la traducción de ideas y cuando representan artefactos del mundo real que se pueden manipular y razonar.

Características de los bosquejos

La naturaleza ambigüa

Hace referencia al punto intermedio entre un esquema lo suficientemente claro para que todos los participantes puedan interpretarlo, pero lo suficientemente indeterminado para que impulse la ideación y reduzca el riesgo de parálisis de la creatividad.

El nivel de detalle

Hace referencia a su complejidad, o número de capas. En este orden de ideas se encuentran bosquejos 2D con el manejo de forma y línea o 3D con el manejo de sombra. A medida que se va profundizando en las sesiones de creación, van quedando versiones de su historia, por ejemplo para los bosquejos en 2D, encontramos bocetos esquemáticos como los abstractos, bocetos representativos de ideas y bocetos de medición más conceptuales como los de disposición general axonométrica, o de piezas.

La fidelidad

Hace referencia a la cercancía o proximidad entre la versión de idea inicial en la mente, que por lo general es difusa y dispersa, y su presentación final en el bosquejo que es el orden de los pensamientos, con todo el proceso de selección que conlleva. La persona que se encargue de crear y mantener el boceto y sus versiones, tendrá que hacer un esfuerzo gráfico por incluir todos los aportes y correcciones, y mantener la última versión del bosquejo, lo más cercana posible a la idea.

La coherencia

Hace referencia a completar el esquema para que los aportes, las ideas y los contenidos sean consecuentes y en ese orden de ideas, muestre la conexión lógica entre ellos.

La secuencia expositiva

Hace referencia a la presentación de las palabras y las frases en una secuencia ordenada de ideas y explicaciones anotadas.

Clasificación De Los Bosquejos

Los bosquejos narrativos o de texto

Son un pequeño resumen de frases y palabras (en vez de párrafos completos) colocadas de manera jerárquica para organizar todas esas ideas sueltas que están dando forma a lo que queremos llegar. Algunas personas los describen como mapas mentales en el que se colocan todas las ideas y se ubican categóricamente para darle un sentido a todo.

Los bosquejos, no necesariamente deben limitarse al uso de la narración o el texto, también podemos utilizar técnicas de pensamiento visual como diagramas, dibujos, imágenes, fotografías, esquemas y notas adhesivas para darles forma, como en el caso del modelo canvas para la generación de ideas de negocio. Lo mejor será visualizar todos los componentes y elementos de la idea utilizando una mezcla de éstos, que se puedan añadir, eliminar o cambiar durante su construcción.

En este orden de ideas, los bosquejos tienen 5 niveles de complejidad:

Ejemplos de bosquejos gráficos: Taxonomía.

A partir de la combinación de los elementos y los niveles de complejidad se formula la taxonomía de bosquejos que los clasifica en 12 modelos de diseño organizados en 4 subcategorías de acuerdo con su propósito.

El proceso de pasar de un concepto inicialmente vago denominado boceto a una propuesta de diseño detallada puede compararse con pasar de una imagen desenfocada a una completamente detallada. El primer trazo no es una idea comunicable, es extremadamente breve, vago y hecho con claves personales, su transformación se basa en la velocidad con el que se pase al siguiente nivel. El bosquejo conceptual como representación inicial de la idea de diseño desenfocado es claramente esencial. En esta definición, junto con las otras citadas anteriormente, el énfasis se coloca en el bosquejo tal como lo perciben los demás, no solo el diseñador.

En cuanto a las características de los boquejos exploratorios:

En cuanto a las características de los boquejos persuasivos:

En cuanto a las características de los boquejos de explicación:

En cuanto a las características de los boquejos para producción:

Los Bosquejos Aritméticos

Utilizados principalmente en la programación de sistemas, los bosquejos aritméticos se consideran ideas abstractas presentadas como gráficos o formas finitas, compuestas por un número limitado de códigos en diagramas que representan esquemas constantes, en el que la constante es una operación cuyo dominio es el objeto terminal mientras el bosquejo se convierte en el objeto terminado. La estructura del dibujo es equivalente al modelo inicial en la categoría de conjuntos aritméticos.

En el caso de los lenguajes de programación funcional, éstos usan tipos de datos básicos constantes, asociados y operaciones primitivas, así como operaciones de formación de programas, a menudo llamadas constructores, como la composición de operaciones, la formación de tipos de registros, la ramificación y la recursividad. El lenguaje consiste en el conjunto de todas las operaciones y tipos derivables de los datos básicos y las operaciones primitivas aplicando los constructores apropiados. Una elección diferente de constructores daría un lenguaje diferente, incluso con la misma elección de tipos y operaciones primitivas. 

Sin embargo, existen constructores que aparentemente no se pueden describir mediante bosquejos, como los objetos de espacio funcional (exponenciales) en categorías cerradas cartesianas, objetos como listas que se definen por recursividad, etc. El objetivo aquí es generalizar el concepto de bosquejo para permitir espacios constructores.

La creación de un bosquejo nace de un primer aporte individual en un proceso denominado método de generación interactiva.

Creación de Bosquejos

El método de generación interactiva

Al observar a los diseñadores y sus métodos se pueden comprender sus técnicas y el contenido de sus bosquejos. En la etapa de bocetado, utilizan métodos informales rápidos para proporcionar una representación inicial del diseño. Esta representación de sus ideas depende de técnicas directas rápidas apoyadas en métodos convencionales de lápiz y papel. El proceso real de creación de ideas de diseño generalmente se concibe como algo que ocurre en la mente y los bocetos de dibujos como intentos de reproducir las imágenes mentales del diseñador.

El método consiste en la coordinación del conjunto de ideas para producir la representación física como un bosquejo en papel. El ejercicio de esta habilidad puede ser relajante mentalmente, lo que a su vez puede reducir las inhibiciones del flujo del pensamiento. Mientras el diseñador dibuja, hay una elección y una selección mental de la información, que puede llevar a ideas de diseño. Tan pronto como la imagen se ha manifestado en alguna forma concreta, como un boceto o modelo (físico o informático), se convierte en parte de la información que se maneja para producir la siguiente idea.

El bosquejo se comparte con quienes puedan hacer aportaciones para mejorarlo, tomando en cuenta puntos de vista que no habían sido considerados por el creador. La co-creación es una excelente estrategia para la etapa de ideación en la que, la comprensión compartida de situaciones complejas requieren la creatividad conjunta y la innovación competitiva impulsada por el diseño. Ambos, la creatividad y la innovación mejoran la interpretación, es decir, la comprensión derivada de las representaciones de los bosquejos mismos.

La co-creación de bosquejos

La co-creación o el diseño participativo es una estrategia que impulsa soluciones más apropiadas a problemas en el bosquejo, los cuales son cada vez más complejos, por lo que requieren enfoques interdisciplinarios. La estrategia, desde diferentes disciplinas y puntos de vista, facilita las contribuciones y los aportes para una creación colaborativa, en el que la evaluación de ideas, el primer plano, el desarrollo de soluciones conceptuales, la comprensión de la perspectiva del usuario, la propuesta conceptual y la evaluación de soluciones, enriquecen el bosquejo con un mayor grado de asertividad.

Durante el bosquejado, las ideas comunicadas por diseñadores, gerentes e ingenieros por lo general, son ambiguas, pero tienen una fuerte influencia en la interpretación y la representación del bosquejo. Es así que los diseñadores se inclinan por los elementos visuales de la representación de bosquejos, mientras que los gerentes son desafiados por la ambigüedad de los bosquejos conceptuales, por lo tanto, prefieren bosquejos en texto o elementos esquemáticos. Lo más complejo durante la co-creación es mantener una comunicación abierta e inclusiva que reduzca el riesgo de llegar a un bosquejo errado. Las decisiones que se tomen durante el bosquejo, determinan la calidad, el costo y la conveniencia del resultado final. Un error de bosquejado se compensa con altos costos de rediseño y mayor tiempo de implementación en las fases posteriores.

Quien concentre la tarea de mantener la contrucción del bosquejo, deberá contar con habilidades comunicativas a través de la representación visual de bosquejos, mediante líneas de forma y sombreado que son la clave para la síntesis de ideas, la inspiración y la exploración conjunta. Todos los seres humanos son únicos y sus experiencias y conocimientos les dan diferentes enfoques de pensamiento, por ejemplo analítico-racional o sintético no racional, aunque también hay un factor incontrolable como la intuición que afectan las aportaciones.

Interpretación de bosquejos

Las contribuciones y los aportes de quienes participan en su creación son afectados por las preferencias estéticas y los prejuicios basados ​​en las emociones. Adicionalmente, existe una brecha entre las preferencias en la representación estética de un consumidor, usuario o cliente y la interpretación del diseño de los creadores. En este caso, se recomienda hacer una prueba de concepto con bosquejos por computadora, simulaciones o prototipos para reducir las diferencias y reducir el riesgo de fracaso.

Cada participante buscará, identificará e interpretará sus ideas de manera diferente, expresándo éstas a través de representaciones exploratorias que dependen de su campo de experiencia. Un bosquejo representado incorrectamente, inhibe la comunicación y por lo tanto impacta la comprensión compartida y la elección de conceptos apropiados. Así, por ejemplo, la interpretación de un bosquejador se fundamenta en su conocimiento de la semántica del diseño, mientras que un desconocedor del bosquejado realizará una interpretación heurística según las experiencias vividas.

Etapas del Proceso de Creación de un Bosquejo

Finalmente, cuando se da por terminado un bosquejo, el paso siguiente es redactar la declaración de concepto. Es decir, un párrafo donde se resume coherentemente la idea completa para que sea fácilmente comunicable. Esto facilita la prueba de concepto o la puesta en escena para su evaluación y corrección.